“Los premios se toman como las
críticas: como de quien viene, y este reconocimiento viene de gente que está
apuntalando el trabajo de y por la cultura”, agradeció Víctor Hugo Morales. Al mismo
tiempo, el periodista señaló que “cada premiación de este tipo es una célula de
resistencia, que nos permite sentir que respirábamos el mismo aire que gente
con los mismos sueños y la misma indignación”.
Los premios Radar es la primera
vez que se otorgan en el marco de la tercera edición de Festival de los Trabajadores
y representa la unidad de organizaciones de ambas centrales obreras con un objetivo
común: construir un faro, “pensar un proyecto cultural visto como derecho
humano, y no sólo discutir qué es el trabajo en la cultura, que también es una
tarea fundamental, sino pensar un proyecto de cultura que sea popular,
inclusiva, feminista y que contenga a la ciudadanía en su conjunto”, explicó
María Frondizi, responsable del Area de Culturas de ATE Capital.
Durante la ceremonia, que condujo
Micaela Lusardi, también se entregaron distinciones, Stella Caloni, Hernán
Coronel “Mala Fama”, Sudor Marika y Milagro Sala quien envió un saludo desde Jujuy.
Además, hubo un reconocimiento a la lucha de los periodistas de Télam, a los de
Radio Gráfica y un homenaje a Mercedes Sosa, que recibió su nieta.
En el Festival participaron 1300
artistas, 23 fueron las sedes, 12 las proyecciones audiovisuales, 32 los grupos
y bandas participantes, 4 muestras fotográficas, 1 muestra de artes
visuales, 60 compañías escénicas, 8 clínicas, 3 jornadas de poesía, 3
jornadas de debate en torno a la cultura y el trabajo.
Radar de los Trabajadores es
un espacio que nace con el objetivo de poner en red la producción cultural de
los sindicatos que lo integran. Radar es fundamentalmente un espacio
de intercambio, articulación y producción para registrar, comunicar, difundir y
compartir entre todos la enorme y extensa labor que se desarrolla en estas
áreas.
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