29

mar

La unidad no se forja con violencia política

La unidad no se forja con violencia política
#Actualidad

En el día de ayer en el plenario de Delegades Generales Nacionales de ATE Capital, vivimos un nuevo capítulo de violencia política e intento de retroceso de nuestro sindicato.

Toda nuestra solidaridad y respaldo a Agustina Panissa, Soledad Santellán y Sandra Di Claudio que presidieron el plenario, situación que generó que un grupo de dirigentes y delegades sostengan un ataque sin precedentes por el rol que estaban desarrollando.


Un dirigente hoy enmarcado en la oposición dijo "es una lástima que vos estés sentada ahí conduciendo este plenario". Y no se retractó ante los pedidos de disculpas que le exigían los presentes. También se escuchó durante el cierre de nuestra Secretaría General Adjunta: “ves por qué no te da para estar ahí”. 


No es la primera vez que intentan convertir los ámbitos institucionales en los que debemos resolver los problemas de nuestres afiliades en una disputa interna o un acto de campaña. Ante la propuesta de la conducción -ya discutida con los sectores SINEP- de realizar 3 medidas de fuerza y movilizaciones por salario, intentaron romper el plenario y bloquear el debate con gritos y agresiones de personas que, además, no venían en representación de sus sectores. Pero todo tiene un límite.

 

Le duela a quien le duela en ATE Capital hay compañeras que conducen, definen, participan de ámbitos paritarios y de todas las discusiones de nuestra organización. 

Lamentamos que aún hoy existan dirigentes que no acepten esta realidad y solo quieran discutir con otros varones. 


En ATE se deben terminar con estas prácticas misóginas, machistas, violentas que también se han dado por parte de mujeres.


Queremos hacer un llamado a la reflexión, a la responsabilidad política e histórica que debemos tener quienes hemos sido elegidos y elegidas por nuestres compañeres. 

Instamos a que esta vez sí reconozcan las definiciones tomadas en el Plenario y logremos  construir la contundente medida de fuerza y marcha que hemos definido.  

La unidad no se construye con violencia política. A ese modelo sindical no volvemos nunca más.


Compartir