Macri, la Argentina no es un depósito mundial de basura

04 septiembre 2019

Macri, la Argentina no es un depósito mundial de basura
   #Ambiente

Repudiamos a Juntos por el Cambio y su nuevo atentado contra el trabajo, la salud pública y la vida de los argentinos y las argentinas y exigimos que se dé marcha atrás con estas medidas.

Pensamos que la época del neoliberalismo Macrista estaba terminada y que no habría nada peor de lo que ya ocurrió. Sin embargo, el pasado jueves 26 de agosto, en medio de la crisis socioeconómica más grave desde 2001, el presidente Mauricio Macri firmó el decreto 591/19  que modifica la prohibición de ingreso al país de residuos peligrosos, ¿qué significa esto para todos los argentinos y las argentinas?


Se aprueba la importación de residuos de cualquier tipo de otros países a nuestro territorio, lo que incluye los residuos peligrosos. En el decreto consideran residuo a todo material, sustancia u objeto que pretenda ser importado o introducido en el mismo estado en que fuera desechado por el generador, y/o sea ofrecido a nuestro país tanto en forma gratuita o abonando una prima para su reciclado, tratamiento o disposición final.


En primer lugar atenta contra el trabajo de miles de recuperadores, recicladores, cartoneros a lo largo y ancho de todo el país. La posibilidad de que haya empresas que importen materias primas (papel, plástico y cartón, entre otras) afecta directamente el sistema de reciclado en los municipios, pone en jaque a las cooperativas y a las personas que viven de reciclar residuos sólidos urbanos.   


El decreto también atenta contra la salud pública, ya que plantea que "resulta innecesario un certificado de origen que acredite la no peligrosidad de los mismos". No certificar habilita que puedan ingresar cualquier tipo de residuos, incluidos los peligrosos, que son aquellos residuos que pueden causar daño a los seres vivos o contaminar el suelo, el agua, la atmósfera o el ambiente en general. Atenta contra la vida de los argentinos y las argentinas.

 

Cabe resaltar que además es inconstitucional ya que nuestra Constitución Nacional en el art. 41 reconoce el derecho al ambiente “sano”, y dice que “Todos los habitantes gozan del derecho a un “ambiente sano”, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras; y tienen el deber de preservarlo”.


Detrás de estas medidas incomprensibles se esconde un nuevo negocio orientado a los amigos de siempre. Quieren que seamos el patio trasero de los países desarrollados, el basural de los países del primer mundo. Defendamos el trabajo, la salud y la vida de los 45 millones de argentinos y argentinas.


Junta Interna Ministerio de Ambiente y Espacio Público (MAyEP)

ÁREA AMBIENTAL - ATE Consejo Directivo Capital Federal

Fundación Germán Abdala