Más de 100 compañeras trabajadoras estatales de todo el país completaron la cursada y conforman la segunda cohorte de la "Diplomatura en Promoción de Políticas de Género y Abordaje a las Violencias", que nació en 2019 y este año contó con financiamiento del FoPeCap.

A pesar de todas las dificultades y en medio de la Emergencia Sanitaria, la Diplomatura pudo llevarse adelante en forma virtual durante el 2021 y el jueves pasado las estudiantes, docentes, trabajadoras y autoridades compartieron una emotiva entrega de certificados en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA.

Creada en 2019 la Diplomatura que surgió a iniciativas de las compañeras de la Junta Interna del Ministerio de Desarrollo Social y fue diseñada en conjunto por la Secretaría de Formación y el Área de Géneros de ATE Capital y la UBA tiene el objetivo de "fortalecer las capacidades de las trabajadoras del Estado en las temáticas de géneros y abordaje a las violencias", señaló Cecilia Castro, Delegada de la Junta.

"Apostamos a la construcción de un espacio de formación feminista, colectivo, integrador, asumiendo la dimensión política de los cuerpos, en los que se encuentran grabadas las propias biografías, que van marcando las trayectorias de cada una en el Estado", explicó.

El encuentro final, que se dio en forma bimodal, contó con la participación por la UBA de Carolina Mera (Decana de la Facultad de Ciencias Sociales), Carolina Spataro (Susecretaria de Género de la Facultad), Mauro Campilongo (Secretario de Extensión) y Alejandra Bazzalo (Coordinadora Académica) y por ATE Capital de Agustina Panissa (Secretaria General Adjunta), Gladys Zena (Secretaria de Formación), Clarisa Spataro (Responsable del Área de Géneros) y Cecilia Castro (Junta Interna de Desarrollo Social), quienes celebraron la segunda edición de "una Diplomatura histórica" que es fruto de una triangulación entre Sindicato, Academia y Estado y destacaron, con orgullo, que para muchas compañeras se trata de la primera experiencia en la Universidad Pública.

En este sentido, Zena contó que no fue fácil rearmar la Diplomatura que está diseñada y pensada de manera presencial para debatir y compartir en formatos talleres pero agradeció el gran trabajo de todas las partes para adaptarla y destacó que la virtualidad tuvo un enorme aspecto positivo que fue que permitió ampliar los márgenes del encuentro: "Compañeras trabajadoras estatales de otras provincias pudieron participar y esto es algo que con el formato presencial hubiese sido imposible. Esta apertura y este intercambio nos acercó y le dio a la Diplomatura un matiz distinto, otras voces y otras miradas de compañeras con realidades muy distintas", festejó.

A su vez, confirmó que el próximo año habrá una tercera edición "en la que esperamos se anoten cada vez más y más compañeras".

Agustina Panissa, por su parte, señaló la importancia de la Diplomatura que permite abordar las políticas públicas así como las violencias en el Sector Público desde las miradas de las propias trabajadoras, así como trazó el objetivo -y el desafío- de que la perspectiva de género "sea incorporada en la formación sindical en todos los niveles y espacios colectivos de participación para lograr las transformaciones que necesitamos".