12 septiembre 2017
Una multitud de trabajadores y trabajadoras estatales disfrutaron el pasado lunes de una jornada de fiesta con motivo de las finales de la Copa Germán Abdala, y las promesas de buen fútbol no defraudaron. Tras dos partidazos, las pibas de En Lucha (Inaes) y los pibes de ATE Avellaneda se consagraron campeones de la Edición 2017 del Torneo de Fútbol 5 de ATE Capital. Como el año pasado, la participación fue masiva y Daniel Catalano, presente durante la jornada, adelantó que se está pensando en incorporar otros deportes así como en la manera de integrar en los torneos a los pibes y pibas con discapacidad. "Para nuestro sindicato, la cultura y el deporte son áreas estratégicas", afirmó.
En el primer turno y ante unas tribunas repletas, el equipo femenino del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social se impuso en los penales a ATE Avellaneda después de igualar 4-4 en un partido vibrante que había arrancado perdiendo 2-0, mientras que en el siguiente turno el conjunto masculino de Avellaneda se tomó revancha de sus compañeras, al superar 4-3 a Los Yoguis (INPI) y consagrarse Bicampeón del torneo.
En simultáneo, se disputó además el partido por el tercer puesto del femenino entre Guarda la Gamba (Ministerio de Educación) y Bandidas Rurales (Agroindustria), con victoria ajustada para el primero por 5-4. En el masculino, por su parte, Héroes de Cartón (MAyEP) se quedó con un lugar en el podio ante la ausencia de su rival.
Una vez finalizados los encuentros, con la presencia de todos los presentes se entregaron trofeos y medallas a los conjuntos que finalizaron en las primeras tres posiciones de ambas categorías y premios a los "botines de oro" del certamen: Gisel Oberman, con 27 tantos y figura indiscutible del Campeón, recibió el premio a la máxima goleadora, mientras que Federico Rodríguez, con 25, lo hizo por parte de Héroes de Cartón.
Estuvieron presentes Alejandro Tsusinsky, Responsable de Deportes de ATE Capital, Daniel Catalano, Secretario General de ATE Capital, y Susana Ferreyra, Secretaria General de ATE Avellaneda, quienes resaltaron la participación "de más de 50 equipos" a lo largo de tres meses de competencia así como el espíritu de camaradería y compañerismo del torneo que ya es un clásico para las y los estatales.
"Nosotros lo que queremos es poder confraternizar, estar todos los días más unidos y encontrar cada vez más cosas que nos hagan sentir compañeros y compañeras. Es por eso que celebramos la alta participación y esperamos hacer muchos más torneos e incorporar otros deportes. Lo que nosotros queremos es un sindicato que se pueda integrar, que pueda tener áreas estratégicas como la cultura y el deporte. Y queremos pensar además de qué manera integrar a los pibes y pibas con discapacidad que están en el Estado y son siempre postergados", cerró la jornada de encuentros Daniel "Tano" Catalano.
INAES le arrebató el título a Avellaneda
Las pibas de En Lucha comenzaron perdiendo 2-0 contra ATE Avellaneda, vigentes campeonas, y la remontada parecía imposible. Pero en el segundo tiempo apareció Gisel "Yiyo" Oberman en toda su dimensión y con 4 goles (uno tras una avivada, otro de cabeza y dos golazos de tiro libre) llevó la final al tiempo extra y luego a los penales, donde la "suerte" favoreció a las retadoras. Fue un partidazo para el recuerdo, en el que INAES logró romper la hegemonía de Avellaneda.
Con el aliento de su banda, que se hizo sentir desde el primer minuto, las pibas de Avellaneda arrancaron mejor aunque no encontraban la manera de lastimar, ante una Mariel Arias que se hacía patrona en la defensa y los tiros desde afuera que no tenían precisión. El primero llegó recién sobre el final del PT tras un rebote de la arquera que Alicia Ruiz empujó con alma y vida a la red, y en el arranque del segundo, Flavia Flopp aumentó la diferencia luego de aprovechar una mala salida desde el fondo.
Fue entonces que Gisele Oberman empezó a pedir todas las pelotas y a exigir a las defensoras rivales, que le hacían marca personal pero debían cometer falta una y otra vez. Las amarillas se apilaban. El equipo de Inaes dependía absolutamente de la 8, que empezaba a mostrar el camino y en un descuido puso el descuento, para el delirio de la tribuna que empezaba a soñar.
Sin embargo, al salir hacia adelante el equipo se desprotegía en el fondo, y Avellaneda encontraba espacios cuando tocaba rápido y preciso. Tras una jugada colectiva sobre la izquierda, Alicia Ruiz recibió sola sobre el segundo palo y aumentó nuevamente la diferencia. Faltaba poco y la diferencia era grande. El título parecía viajar nuevamente a Avellaneda.
Pero una "expulsión" (en realidad una tarjeta azul), cambió el partido. Oberman, viva, hizo amonestar nuevamente a Fatima Martínez, quien le hacía marca personal hasta ese entonces, y la 7 no pudo volver a ingresar. Ya sin su sombra, Oberman hizo estragos. De cabeza, tras recibir sola en un córner, puso el 2-3 y sobre el final sentenció la parda con un bombazo al ángulo de tiro libre que despertó los aplausos de propios y ajenos. Empate 3-3 y tiempo extra.
Con los nervios y el cansancio a flor de piel, el juego empeoró y el partido se hizo trabado, pero Gisel, con otro golazo de tiro libre, marcó el 4-3 y puso por primera vez en el partido a En Lucha arriba en el marcador. Duró poco. Segundos después, Bopp agarró una pelota en el mediocampo y marcó el 4-4 con un remate desde lejos, quizás haciendo justicia. El partido se definía en penales.
Desde los doce pasos, la "suerte". Yiyo misma convirtió el primero, luego ambas arqueras se lucieron con una tapada y finalmente Sofía Perini marcó el 2-1 de la serie, que sería el definitivo. Inaes gritó campeón tras un partidazo que será recordado. Aplausos de los presentes y saludos entre las protagonistas.
ATE Avellaneda volvió a dar la vuelta en Boedo
Inmediatamente después, el turno de los muchachos. En un partido que prometía fútbol de alto vuelo, el conjunto de Avellaneda defendía el título logrado el año pasado ante Los Yogui, equipo del IMPI. Avellaneda, por su parte, venía de dejar en el camino a ATE Energía, en lo que se decía había sido "una final anticipada". ¿Sería?
Desde un primer momento, Avellaneda se hizo del control de la pelota y con toques rápidos y la participación en el juego de su arquero, Adrián Bravo, logró inclinar la cancha. Sin embargo, el primer tanto de la noche sería de Los Yogui, que esperaban ordenados y buscaban salir rápido de contra. Avellaneda sintió el golpe, pero fue Bravo, gran figura de la noche, quien despejó rápido las dudas con un puntillazo desde mitad de cancha, imposible hasta para el bueno de Damián Vázquez, que pareció estar tapado. Con el 1-1, el vigente Campeón se acomodó y Néstor Gutiérrez la colgó del ángulo con otro tiro desde lejos, poniendo las cosas 2-1.
En el segundo tiempo, con el rival jugado a tener que conseguir el empate, Avellaneda lució todo su fútbol combinando rapidez, precisión y juego en equipo, y tras dos lindas jugadas colectivas, Santiago Gutiérrez y Lautaro Alfonzao, goleador del equipo, marcaron el 4-1. Partido liquidado, llegó a escucharse en la tribuna.
Pero faltando poco para el final, Los Yoguis reaccionaron y Federico Reinoi y Pablo Faerman, con un remate rasante de tiro libre al segundo palo, pusieron al equipo a tiro del empate y los dos tiempos del alargue. Máxima tensión en los instantes finales, y el equipo jugado a la igualdad, pero ya no habría tiempo para más. Pitazo final del árbitro y desahogo de Avellaneda, que se dejó estar y casi sufre el tiempo extra, aunque, como el año pasado, terminó festejando.
Vuelta olímpica y delirio merecido de la banda, que levantó la Copa Germán Abdala y el próximo año irá por el tricampeonato.
¡SALUD, CAMPEONES!