13 octubre 2017
Tal cual lo definimos en plenario general de delegados y delegadas, los estatales de la Ciudad de Buenos Aires paramos y movilizamos al Ministerio de Hacienda del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires para exigir el correcto encasillamiento de los y las trabajadoras, el aumento de las asignaciones familiares, el bono de fin de año y el pase a planta permanente para contratos de locación, licencias terapéuticas y licencia por violencia de géneros, entre otros reclamos.
La medida responde al anuncio de la nueva carrera para los empleados estatales de la ciudad que el macrismo viene realizando hace más de un año con un 2 % de aumento a cuenta de la misma. Al respecto desde ATE Capital decimos que si bien el encasillamiento se está llevando adelante, no existe reconocimiento de salario, coordinaciones, títulos de los profesionales y no reconocen la tarea que hace, en algunos casos, más de 20 años la gente realiza.
En tanto, nuestro gremio presentó una propuesta de carrera en la cual los salarios deberían estar ligados a la canasta básica que mide el propio Organismo de estadísticas de la Ciudad de Buenos Aires, aunque hasta el momento, el gobierno porteño la desconoce.
Fallo a favor de la pluralidad sindical
En septiembre y tras años de bregar por un espacio en la mesa paritaria, finalmente, obtuvimos el aval de la justicia que ordenó al gobierno de la Ciudad a darle un lugar en la discusión donde históricamente tuvo un único interlocutor.
En tal sentido, Luciano Fernández, secretario gremial de ATE Capital dijo: “Larreta al igual que todos los jefes de gobierno que precedieron, no tuvo en cuenta la representación de nuestro gremio para realizar una carrera, pero lo que es peor, van en contra de la voluntad de la mayoría de los trabajadores y trabajadoras que manifiestan que la carrera está mal discutida”.
“La firma de la carrera proyecta un aumento de $ 3000 en la promoción y realmente desmoviliza y no invita a formarse y a esforzarse” – y agregó – “Nosotros no queremos vivir de nuestra vocación sino de nuestro salario”, enfatizó.
Campaña política estatal
Según denuncias de diferentes Organismos, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, obliga a funcionarios y a empleados administrativos de la Ciudad de Buenos Aires que participen del timbreo y atiendan las llamadas del call center. Una vez al mes entre 700 y 1000 funcionarios y empleados de la ciudad de todos los ministerios destinan dos horas a recorrer una comuna por vez.
“Es una vergüenza que hagan esto, nosotros no queremos hacer timbreo, no queremos tener sombrillas ni globos en las esquinas; nosotros queremos que nos paguen por nuestro trabajo y si tenemos ganas de militar, queremos hacerlo en libertad y en pluralidad y en democracia que es a lo que no están acostumbrados los de Cambiemos”, finalizó el dirigente.