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“Floreceremos mil juanas” marcaba la intervención, “Encarcelaron a una Milagro Sala, ahora pelearán contra millones” encabezaban los carteles de la marcha que confluyó en la Plaza de Mayo. Allí, se realizó el acto de conmemoración del 8 de marzo bajo las consignas “Libertad a Milagro Sala”, “Ni un derecho menos”, “Ni un despido”, “trabajo digno”.
En el escenario, los carteles daban cuenta en el cuerpo de compañeras despedidas y referentes de sectores del Estado en conflicto que en cada puesto de trabajo que se pierde hay una política pública menos, un derecho que se deja de garantizar al conjunto de la población, y el crecimiento de nuestro país que se frustra. En el documento que sintetizaron entre todas las organizaciones a esta política de desempleo y cierre de áreas estratégicas del Estado, se la denunció como plan de ajuste sistemático y hambre para las mayorías; lo cual, a su vez, necesita de Milagro Sala presa, de la violencia instituida y autorizada y de la sociedad amedrentada. El ajuste no es sin represión. “Y, en un contexto donde reina la opresión y la desigualdad en todas sus facetas, las mujeres sabemos que seremos doblemente oprimidas”.
En las distintas acciones que realizaron a lo largo del día, las mujeres trabajadoras afirmaron que “No puede haber conmemoración de un 8 de Marzo con una mujer, una dirigente social ilegalmente presa, cuando se vulneran los tratados internacionales de derechos humanos, las Convenciones. Durante todo el día, se puso de relieve que es por ser mujer, pobre, originaria, constructora de poder y de dignidad de los más olvidados, de las más olvidadas, que apresaron sin juicio ni pena a Milagro Sala, atentando contra la democracia, escarmentando y poniendo en riesgo a todos y a todas.
Más temprano, en el anexo de la Cámara de Diputados/as de la Nación, en conferencia de Estela Díaz, secretaria de Género e Igualdad de Oportunidades de CTA diputadas nacionales Juliana Di Tullio, Mayra Mendoza, Carolina Gaillard, Araceli Ferreyra, Lucila De Ponti, Teresa García, junto a Adela Segarra, referente nacional del Frente de Mujeres Evita; Mara Brawer, secretaria de la Mujer del PJ Capital; Victoria Montenegro, secretaria nacional de Derechos Humanos de la agrupación Kolina y la decana de la Facultad de Periodismo de La Plata, Florencia Saintout, entre otras referentes sindicales, políticas y sociales, anunciaron distintas acciones que se llevarán adelante por su liberación.
El acento estuvo puesto en la enorme preocupación por la escalada de violencia política que se vive en Argentina desde que asumió Mauricio Macri, y se solicitó una entrevista al representante regional de América del Sur del Alto Comisionado de las Naciones para los Derechos Humanos, Américo Incalcaterra, y se expresó que elevarán una denuncia al Relator Especial de las Naciones Unidas sobre la situación de las y los defensores de derechos humanos.
Además este conjunto de mujeres y ATE Capital visitaron la carpa de los bancarios y las bancarias. En un cálido y emotivo encuentro allí se reconoció que atravesamos por una etapa necesaria y profundamente sindical, y en el marco del Día Internacional de Mujeres, el desafío es construir en unidad para sostener el trabajo, para no retroceder en los derechos que las mujeres y los y las trabajadoras conquistamos en estos años, para no bajar ni una sola de las banderas y trabajar también en lo sindical por la igualdad de género para la justicia social.
