14 septiembre 2017
La nueva reforma educativa del macrismo, impuesta en forma inconsulta y sin participación de la comunidad educativa, afecta la tarea de las y los docentes y establece que las y los estudiantes de 5to año realicen “pasantías” en empresas bajo la figura de “emprendedurismo”, entre otras modificaciones a la currícula pensadas desde una lógica empresarial más que pedagógica e inclusiva. Esta iniciativa consiste sin lugar a dudas en la antesala de la flexibilización y reforma laboral pregonada por el Gobierno Nacional, tomando a las y los estudiantes como mano de obra barata para la reducción de los costos laborales.
A su vez, repudiamos el instructivo “anti toma” del Ministerio de Educación, cuya aplicación fue suspendida por la Justicia de la Ciudad de Buenos Aires a través de una medida cautelar firmada por la jueza Elena Liberatori.
El mismo ordena a las direcciones de las escuelas a denunciar en comisarías las “situaciones de tomas”, instando a las autoridades a declarar en contra sus propios estudiantes y además atribuye a los fiscales la consideración del tipo de delito (violación de domicilio, usurpación) o contravención (ingreso o permanencia en lugar público o privado contra la voluntad de titular). Este instructivo no promueve el diálogo dentro de la comunidad educativa, que pregonan los funcionarios en la televisión, sino que, por el contrario, estigmatiza y persigue a nuestros jóvenes y adolescentes.
Cabe señalar, además, que el instructivo es el mismo que en el año 2012 el ex ministro Esteban Bullrich envió a las escuelas y fuera suspendido por la justicia porteña a partir de la intervención de la Defensoría General de la CABA.
Como si fuera poco, de una manera sumamente irresponsable, en las últimas horas la Ministra de Educación salió a desestimar dicho Protocolo y a desconocer su aplicación cuando los hechos de público conocimiento demuestran todo lo contrario: persecución a las y los adolescentes y sus familias que los acompañan, ingreso de la policía a las escuelas, imputación de delitos y contravenciones, 17 escuelas tomadas y un Gobierno de la Ciudad que continúa dándole la espalda a nuestros adolescentes y sus familias.
No solo es repudiable, grave y preocupante la aplicación del instructivo sino también la acción del Consejo de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes que debiera intervenir instando a las autoridades del Ministerio de Educación para que dé marcha atrás en sus medidas, en pos de la defensa y protección de los derechos de las y los adolescentes involucrados; garantizando la seguridad e integridad física de las y los estudiantes, su derecho a la participación, a ser oídos, a la libre asociación, a que sus opiniones sean tenidas en cuenta en las cuestiones que los involucre, su interés superior; así como para vehiculizar los canales del diálogo y resolución del conflicto.
En este sentido, exigimos a las autoridades del GCBA que cesen de manera urgente la criminalización de la protesta y atiendan el reclamo central de las y los adolescentes que consiste en el cumplimiento de la Ley de Educación Sexual Integral y el rechazo de la prueba piloto inconsulta y sin participación de la comunidad educativa sobre la nueva reforma educativa denominada la “Secundaria del Futuro”.
Ya tuvimos el claro ejemplo de la Nueva Escuela Secundaria en su momento con el detrimento de la calidad educativa para nuestros adolescentes. Por ello, acompañamos la lucha de nuestros pibes para que tengan una real educación de calidad que pueda permitirles proyectar un futuro digno como futuros trabajadores.