La Educación Sexual Integral (ESI), como política pública instaurada en 2006 y construida sobre cinco ejes fundamentales: cuidar el cuerpo y la salud, reconocer la perspectiva de género, respetar la diversidad, valorar la afectividad y ejercer nuestros derechos, no solo orientan contenidos pedagógicos, sino que expresan una concepción de ciudadanía, de justicia social y de derechos humanos.
Desde ATE Capital celebramos un nuevo convenio de la Organización Internacional del Trabajo realizado en la ciudad de Ginebra en Suiza el 21 de junio de 2019 y aprobado en nuestro país hoy a través de la Ley 27.580.